You are not alone

(Necesidad de ficción)
Ahh… nada como comer un Garoto y a continuación el mate amargo y escribir esto al peor estilo Lola Copacabana. Nada como acostumbrarse a que todo anda mal para empezar a ser feliz, al mejor estilo Susanita. Mientras la cortina vuela al son de la tormenta de las seis, huelo la lluvia y espero que alguien me conteste desde el otro lado de la Matrix. Busco amigues nueves, les que tengo están ya obsoletes, eso podría decir el anuncio. O tal vez solicitar por la radio alguien interesade en jugar al paddle con una desconocida. Ah, pero si tengo una nueva amiga, se llama Susan, Susan Riviu. Ella me escribe cartas virtuales desde el otro lado de nuestra computadora, que es la misma, aunque no nos crucemos. Raro, no? En fin, pero ella no juega al paddle, su sedentarismo comienza a parecerse también a una obsolescencia, igual que el mío. Veamos, tengo otra amiga nueva, pero no, no es tan amiga, mejor la dejamos para otra cosa, la verdad que no la aguanto.
Vamos, contesten!! Am I alone?
Si no hay sexo no cuenta y si hay ciencia ficción, menos. There is some fiction in your truth, and some truth in your fiction. To know the truth, you must risk everything.
Con la lluvia, los lagartos asoman sus pieles a la ventana. Oh, I love that bodies!
A seguir trabajando! Mi política es de poco descanso hoy. Alguien sabe lo que sé… debo correr.
Cuántes quisiéramos que la realidad estuviese en otro lugar, cuánta falta de emociones!
La lluvia es cierta y no esta pantalla incandescente, ni siquiera el cotidiano balcón. Caray, Julio! Se te siente.
Vamos, contesten!! Am I alone?
Si no hay sexo no cuenta y si hay ciencia ficción, menos. There is some fiction in your truth, and some truth in your fiction. To know the truth, you must risk everything.
Con la lluvia, los lagartos asoman sus pieles a la ventana. Oh, I love that bodies!
A seguir trabajando! Mi política es de poco descanso hoy. Alguien sabe lo que sé… debo correr.
Cuántes quisiéramos que la realidad estuviese en otro lugar, cuánta falta de emociones!
La lluvia es cierta y no esta pantalla incandescente, ni siquiera el cotidiano balcón. Caray, Julio! Se te siente.
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